Todo sobre la Manzanilla, con Barbadillo

A 30 minutos en coche de Jerez de la Frontera en la provincia de Cádiz, la pequeña localidad costera de Sanlúcar de Barrameda, la cual es una zona de producción de no menos de 3 denominaciones de origen: «Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda», «Jerez-Xérès-Sherry» y «Vinagre de Jerez».

Te proponemos descubrir la primera de ellas en una inolvidable visita a una de sus bodegas más emblemáticas, cuyas impresionantes instalaciones han marcado desde siempre el urbanismo del centro histórico de Sanlúcar: Barbadillo.

La web del Consejo Regulador resume perfectamente su elaboración: “La Manzanilla es un vino blanco y seco, elaborado con uva palomino y envejecido bajo una capa de levaduras llamada velo de flor. Su crianza se lleva a cabo exclusivamente en bodegas de Sanlúcar de Barrameda. Las especiales condiciones climáticas de esta ciudad, situada en la desembocadura del río Guadalquivir, propician el desarrollo de un velo de flor muy peculiar. Como consecuencia, el vino adquiere características particulares y diferenciadoras”. La Manzanilla sometida a un período de crianza excepcionalmente prolongado, con más complejidad y estructura, es llamada “Manzanilla pasada”.

Pero una visita a Bodegas Barbadillo no es sólo una oportunidad para descubrir o conocer un poco más sobre la Manzanilla, sino que es una auténtica inmersión en el alma y la tradición andaluzas. De hecho su pico anual de consumo es en primavera, en el momento de la Feria de abril en Sevilla, donde no te sería difícil constatar que es la bebida reina de la fiesta. «Solear», la famosa Manzanilla de Barbadillo, está en todos los labios, en todas las mesas y hasta en los banderines que adornan las casetas.

Con su arquitectura tradicional y su ambiente atemporal, la bodega sanluqueña recuerda que nació en 1821 y que es una de las diez empresas familiares más antiguas de España. Por tantos argumentos, se trata de una visita imprescindible durante tu estancia en la región de Sevilla y Cádiz.